
"Entonces comenzó a hablar con muchos y la gente le siguió.
Comenzaron a creerle, muchos les confiaron sus secretos más íntimos dirigidos al desarrollo eterno. Y muchos le dijeron, si, vemos nuestra vida eterna, pero dinos como contársela a los demás.
Y él estaba contando historias, dándoles números, dándoles la vida que ellos mismos habían visto, pero él no se identificó.
Eran iguales. Su movimiento no siempre fue consistente. Tuvieron que vencer resistencias, pero esos mundos distantes, sus ecos que ya se habían desarrollado, tal vez, al nivel de la eternidad en su fase de realización sostenida, los llevaron a todos como una cohorte unida hacia su futuro infinito.
Y esta ola del infinito abrumó a todos, mientras que la alegría se manifestaba incluso en las situaciones humanas más terribles.
Trataron de animarlo, pero él siempre estaba con ellos. Porque su camino era el mismo: el cielo y la tierra, y todo lo que hay en ellos, eran la creación de sus mentes.
Enseñó a crear, a ser y a ser por la eternidad. Porque sólo esa eternidad renace y trata de ser ella misma, la cual se da cuenta de lo que sucede dentro de esa eternidad y tiene en todos los niveles la propiedad de la eternidad"
Ustedes mismos son los constructores de la luz en la eternidad y del camino a la eternidad.
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