1.7. EL PRINCIPIO DE LA DIVINIDAD: LA BÚSQUEDA DE LA INMORTALIDAD DEL CUERPO, DE LA VIDA ETERNA Y DEL DESARROLLO DE LA CONCIENCIA VERDADERA ES LA PRÁCTICA DEL MÁS ALTO PERFECCIONAMIENTO DE LA EXISTENCIA HUMANA. Para aplicar este principio a la gestión de eventos, hay que considerar el estado incorruptible del cuerpo como el verdadero estado de cualquier evento. Al construir un evento en torno a un cuerpo eterno, obtendrá el control del evento y, en consecuencia, la salud completa.
1.8. UNA PERSONA ES SUFICIENTE PARA RESUCITAR Y RECONSTRUIR EL MUNDO PARA QUE NO PUEDA SER DESTRUIDO. El principio dice que a partir de una sola percepción, es decir, la percepción de una sola persona es posible tener un mundo eterno. Esto se debe a que, aunque se trate de la percepción de una persona singular, el alma humana es una estructura infinita en volumen, forma parte del mundo y está presente en todos los eventos, es más, el alma humana es la estructura organizadora del mundo. Sabiendo esto, se puede trasladar el control de los eventos a un control de tiempo. Esto significa que es posible utilizar este principio para gestionar los eventos en el momento adecuado.
Grigori Petrovich Grabovoi, G. (2001). ¡La Resurrección de las personas y la vida eterna son desde ahora nuestra realidad !
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